El activista por la paz, víctima del conflicto armado y director de Ciudadanía Inteligente anunció este lunes 6 de diciembre, que aspirará a la Cámara por Bogotá en las próximas elecciones.
Adolfo Rivas inició como defensor de DDHH a los 14 años, las extintas FARC intentaron asesinar a su mamá cuando tenía 4 años, y en el 2004 fue desplazado por la política de seguridad democrática de Álvaro Uribe Vélez.
Hijo de una caqueteña y un rolo, sufrió la violencia desde niño, razón que lo llevó a convertirse en un defensor de los DDHH cuando aún estaba en el colegio con tan solo 14 años. Su activismo en defensa de los derechos de la ciudadanía lo hizo víctima a muy temprana edad de amenazas e intimidaciones, que lo obligaron a desplazarse a la ciudad de Bogotá desde donde continuó su activismo hasta la fecha, ha trabajado por los derechos de las víctimas del conflicto armado, la implementación de los acuerdos de paz, la participación política de los jóvenes y la defensa del medio ambiente.
En palabras de Adolfo: “La violencia, es consecuencia de un estado ausente incapaz de garantizar los derechos básicos de la población. La reparación y la no repetición pasan por construir un estado garante de la vida y la propiedad del ciudadano, que promueva un desarrollo económico sostenible, donde el gobierno, la sociedad y la empresa trabajen para cuidar la vida. Para lograr este propósito, se requiere transformar la política en Colombia, y esa transformación debe hacerse con la participación política de las víctimas, las mujeres, los jóvenes y el campesinado”, sentencia el ya candidato.
Según Adolfo su candidatura es el resultado de una decisión colectiva de organizaciones de víctimas de la ciudad de Bogotá, jóvenes activistas por la paz, y la defensa del medio ambiente con una presencia importante en las universidades de la capital. Otras fuentes también afirman que la candidatura del joven activista cuenta además con el apoyo de varios Ediles de la ciudad, que reconocen su trabajo y potencial político dadas las condiciones inusuales de esta elección, donde la mayoría de candidatos de derecha o de izquierda que ya están en la política son vistos con desconfianza por la ciudadanía.
Pero más allá del apoyo social o político, su candidatura se respalda en una vida dedicada a la búsqueda de la paz, pues su historial como defensor de DDHH, líder de víctimas, promotor del SÍ en el plebiscito por la paz, voluntario del desminado civil humanitario y líder de varios procesos ambientales, de reconciliación y desarrollo sostenible, lo convierten en uno de los líderes sociales que podrían llegar al congreso en 2022.
Aunque Adolfo confirmó su candidatura no confirmó por cuál partido político piensa aspirar, en una entrevista anterior para este medio, afirmó que está comprometido con el pacto histórico pero que no hará parte de una lista cerrada, razón que le deja como única opción aspirar por el partido verde que dejó en libertad a sus militantes para apoyar al pacto histórico o a la coalición de la esperanza, también podría ser por fuerza ciudadana el movimiento político que fundó el Gobernador del Magdalena Carlos Caicedo, y que se encuentra recogiendo firmas para lanzar una lista a la cámara por Bogotá. Lo cierto es que hasta este fin de semana los partidos políticos tienen plazo para inscribir sus candidatos a la Cámara de Representantes y al Senado de la República.
