Los ojos del mundo entero están en Afganistán, pues allí la situación es demasiado grave y compleja en especial para las mujeres que viven en el territorio. Tras la llegada del régimen Talibán, quienes se rigen bajo la ley islámica, han venido estableciendo una serie de actividades y comportamientos que quedan totalmente prohibidos para las mujeres.

Este régimen misógino y radical, quiere volver a la época antigua en donde la mujer era totalmente minimizada por los hombres, cabe recordar que por años las mujeres han sido silenciadas, censuradas, maltratadas y vulneradas de sus derechos en los territorios islámicos por sus radicales leyes machistas.

Farzana Kochai, una parlamentaria afgana, habló con la FM Radio y manifestó que toda la población está sumida en incertidumbre y temor tras la llegada de los talibanes al poder. “Tenemos un vacío de poder, sin saber que va a pasar y cómo se manejará el tema de derechos humanos”, expresó la parlamentaria.

“Nosotras éramos un objetivo, creemos que habrá determinados cambios, espero que los talibanes digan que las mujeres podemos hacer parte de la sociedad, que podamos acceder a educación, que respeten nuestros derechos”, dijo Kochai en dialogo con la FM Radio ya que los talibanes no reconocen los derechos sobre ellas, dijo que las mujeres temen por lo que vaya a pasar con sus vidas.

La parlamentaria también habló acerca de la retirada de las tropas norteamericanas de su territorio y del discurso del presidente de los Estados Unidos Joe Biden. Expresó que el gobierno de los Estados Unidos se retiró sin que existiera un acuerdo de paz, sin que hubiese habido un dialogo entre EE.UU y talibanes, “mientras EE.UU estaba en Afganistán podríamos haber hablado de un gobierno compartido, pero se fueron de golpe y le dejaron todo a los talibanes”, manifestó.

Sumado a todo esto, la defensora de los derechos de la mujer y periodista Humira Saqib, denuncio que los talibanes han empezado a ir casa por casa buscando a las mujeres activistas. “Las activistas estamos atrapadas aquí, nos escondemos en casa de amigos o familiares y no podemos salir por el riesgo que corremos”.

Las mujeres afganas en este momento están pasando por una grave situación, en las que se les impide hacer actividades tan cotidianas como ejercitarse, montarse en una moto o bicicleta, también bajo el régimen talibán ellas pueden ser acusadas por tener relaciones sexuales por fuera del matrimonio y además su voz no se puede escuchar ni  para reírse.

No pueden dedicarse a nada más que no esté vinculado con las labores domésticas y pueden educarse pero solamente dentro de los límites de la ley islámica. En cuanto a su manera de vestir no tienen permitido mostrar ninguna parte de su cuerpo y están obligadas a llevar el burka, les queda totalmente prohibido usar tacones y maquillaje, de lo contrario las que se oponga será lapidada.

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