El mediático caso del médico que atacó con arma de fuego a un grupo de atracadores que lo emboscaron en un puente peatonal de Bogotá, sigue siendo motivo de debate.
La Fiscalía General de la Nación determinó que en el caso del médico capturado luego de haber atacado a un grupo de atracadores, deberá se dictada la preclusión, pues según argumentan al darse el ataque por una razón de defensa personal no debería responder por cargos de homicidio, como se le imputó en un principio.
Aquel caso, que generó un enorme debate entre la opinión pública sobre los derechos del ciudadano de defenderse ante un peligro inminente, se dio el pasado 30 de enero de este año. Existen unas grabaciones tomadas por cámaras cercanas al puente peatonal donde ocurrió el hecho, las cuales muestran cómo el médico se disponía llegar a su residencia, para luego ser abordado por los asaltantes, quienes no contaron con que su víctima tenía un arma de fuego en su poder.
“Es preciso dejar en claro que en este episodio la víctima es el sujeto pasivo del atraco. La reacción contra los agresores sólo ocurrió tras recibir de aquellos golpes con la cacha de un revólver; múltiples heridas con arma blanca y el intento violento de arrastrarlo hacia un vehículo, lo que lo llenó de miedo y de valor para enfrentar con su arma a los sujetos, en el preciso momento en que aquellos disparaban contra su humanidad”, explicó el abogado del médico, Hernando Benavides Morales.
Según información compartida por Semana durante este miércoles, la Fiscalía pedirá adelantar una audiencia para que el juez encargado ratifique la decisión y pueda dejar en libertad al médico, absolviendo de la responsabilidad de la muerte de los tres atracadores que lo emboscaron esa noche y terminaron muertos sobre el puente peatonal de la calle 121 con carrera Novena.
Recordemos que, en aquel entonces, el médico explicó a las autoridades que días anteriores al hecho había recibido varias amenazas, razón por la cual tenía en su poder un arma de fuego. Además, el médico afirmó que durante el forcejeo uno de los asaltantes alcanzó a herirlo con un arma blanca, para luego ser arrinconado por los otros dos hombres, por lo que procedió a defenderse con la pistola que llevaba consigo.