La mayoría de las veces -para quienes no la hemos vivido- los relatos de la guerra suenan descabellados; tanta maldad no puede ser real, alguien no pudo haber hecho eso y contarlo como si nada. Pero en este país, la realidad siempre logra superar la ficción.
A través de la W Radio, Daniel Coronell dio a conocer quién es «el cerebro financiero del despojo».
Luis Gonzalo Gallo no es un paramilitar, lo único que lo impulsó a desplazar a más de 130 familias en Urabá, fueron sus ansias de ganar más plata.
Gallo nació en Nueva York y se crio en Colombia, estudió en la Universidad de Georgetown en Washington D.C.; hizo un Máster en Administración de Empresa en la Universidad de Harvard. Trabajó en el banco JP Morgan, donde eventualmente fue nombrado vicepresidente de banca de inversión para América Latina.
Dentro de las muchas vueltas que da la vida, termino en la junta directiva del Fondo Ganadero, mismo que tenía entre sus socios, testaferros de paramilitares.
Es así que terminó asociado a la cuñada de los hermanos Castaño, Sor Teresa Gómez, quien compraba los predios a 350 mil pesos por hectárea, cuando pagaba. Cuando llegaban a las cabeceras municipales, en realidad les ofrecían centavos por las fincas quemadas a las que sabían que los campesinos no iban a volver, además cuando estaban de humor los subían a camiones para llevarlos a firmar las escrituras.
En otras ocasiones, notarios amigos del Fondo, eran quienes se encargaban de hacer el papeleo. Por ejemplo, Miguel Francisco Puche Yáñez, quien es todavía notario en Monteria; en aquel momento era titular de la notaria tercera de la ciudad. «Autentica los poderes otorgados bajo presión por los campesinos de Tulapas, algunos de ellos sin firmas y en ausencia de otros elementos de validez.», señala un documento judicial que Coronell cita en su publicación.
Gallo por su parte, siempre ha sostenido que para él todo esto no fue más que un negocio. Y la semana que viene declarará ante la JEP, a la cual se sometió justo cuando su juicio iba a empezar en la justicia ordinaria.