La divisa estadounidense ha experimentado una caída significativa en Colombia durante las últimas dos semanas, llegando a cerrar en $4.423,14 el 14 de abril, según la plataforma Set-FX. Esta disminución se produce tras haber alcanzado máximos históricos, superando los $5.000 después de que Gustavo Petro asumiera como presidente del país.
El movimiento bajista del dólar se intensificó tras el anuncio de la inflación de Estados Unidos, la cual cerró por debajo de lo esperado por los analistas (5% en marzo). Este hecho ha favorecido al peso colombiano, que continúa en revaluación después de ser una de las monedas más devaluadas.
Además, otro factor que podría explicar el buen comportamiento del peso colombiano es el aumento en los precios internacionales del petróleo, luego de que la OPEP (Organización de Países Exportadores de Petróleo) recortara la oferta. El 13 de abril, el barril del petróleo Brent, referencia para Colombia, cerró en USD87,33, mientras que el West Texas Intermediate (WTI) cerró en USD83,23.
El ministro de Hacienda y Crédito Público, José Antonio Ocampo, atribuyó este fenómeno a la política macroeconómica del Gobierno nacional. Ocampo afirmó que «la fuerte disminución de la tasa de cambio y de las tasas de interés de los bonos de deuda pública (los TES) reflejan la creciente confianza en la política macroeconómica del gobierno del presidente Petro».
El ministro también señaló que algunas declaraciones de miembros del gobierno de Petro sobre el petróleo, el principal producto de exportación de Colombia, podrían haber influido en la devaluación de la moneda. Sin embargo, destacó que el presidente ha dejado claro que se respetarán los contratos y se evaluarán cuántos más se podrían requerir.
Juan David Ballén, director de Análisis y Estrategia de Casa de Bolsa, comentó a Noticias RCN que no ha habido anuncios que generen nerviosismo a los inversionistas. Por el contrario, el Gobierno ha mostrado una actitud moderada y responsable, lo que contribuye a generar confianza en el mercado.
