El mandatario sorprendió a varios uniformados que se encontraban de servicio y con quienes dialogó sobre las protestas y los cambios que se prevé realizar.

De manera sorpresiva, el presidente de la República, Iván Duque, acudió este miércoles en horas de la madrugada a tres Centros de Atención Inmediata (CAI) de la ciudad de Bogotá, los cuales fueron vandalizados hace una semana durante las protestas en contra de la Policía Nacional, las cuales también dejaron un saldo de varios muertos y heridos durante los enfrentamientos entre uniformados y manifestantes.

Llegando hasta los puestos ubicados en los sectores de Kennedy, Castilla y Ferias, el presidente Duque sorprendió a varios de los uniformados que se encontraban monitoreando cada zona. Entre sus charlas, les agradeció por la labor prestada en medio del difícil ambiente que se vive durante estos días.

Uno de los detalles más llamativos del encuentro de esta madrugada fue la forma en que el jefe de Estado decidió ir vestido para el encuentro, portando la chaqueta característica de los miembros de la institución a modo de respaldo, justo en el momento que miles de ciudadanos se cuestionan la legitimidad de la fuerza pública.

Según informó Blu Radio, durante el encuentro del mandatario con los agentes de policía, estos se encargaron de explicar la situación que vivieron durante los disturbios de hace una semana, así como los daños sufridos en las estructuras de los CAI que fueron vandalizados a manos de los manifestantes.

De igual forma, la emisora comentó que la vicepresidenta Marta Lucía Ramirez también acudió a otros CAI de la ciudad con la misma intención de dialogar con los uniformados, y conocer, desde sus versiones, la forma en que se desarrollaron las protestas y el tipo de apoyo que requieren en estos momentos ante la posibilidad de nuevas marchas manifestaciones.

El encuentro que fue registrado por varias cámaras, cuyas fotografías están siendo compartidas de forma masiva en redes sociales, ha generado una gran indignación entre miles de colombianos que ven cómo el jefe de Estado prefirió visitar a los policías antes que a los familiares de las víctimas que murieron tanto por procedimientos de detención, como en las mismas protestas.