Según un reporte presentado por una de las farmacéuticas que trabajan en la vacuna contra el virus, una posibilidad implica el uso de extractos de tiburones.

La farmacéutica británica GlaxoSmithKline, tiene en alerta tanto a los equipos de investigación del Covid-19 como a colectivos animalistas, ya que al parecer uno de los métodos más adelantados hasta el momento para el combate de la pandemia y que además parece haber ofrecidos resultados positivos está hecho a base de tiburones.

El reporte fue hecho por el diario Express del mismo país, el cual informó como el equipo investigador de la farmacéutica avanza en la posible vacuna y que para su realización han usado el escualeno de tiburones, extracto conocido por ser la fuente de la que se obtiene el aceite de hígado del pez y al cual se le atribuyen una serie de beneficios para la salud.

Sin embargo, según advierte el medio britanico el costo ambiental que significa el uso del escualeno supondría una alta posibilidad de extinción de varias especies de tiburones. No obstante, ante la posibilidad de que la opción de una vacuna efectiva sólo sea posible por medio del compuesto tiene en conflicto a la comunidad científica por los costos morales ante la posibilidad de extinción de toda una especie.

Express también comentó en su reporte como según las valoraciones hechas por los científicos y teniendo en cuenta que la cantidad de escualeno no es muy elevada para la realización de la vacuna, pero que está igual se tendría que hacer de forma masiva implicaría la muerte de 500 mil tiburones para poder cumplir con la demanda por parte de todos los países del mundo.

Debido al peligro en que se encuentra toda la especie, las organizaciones animalistas han mostrado un rotundo rechazo a que los estudios se sigan basando en el producto a base del pez, advirtiendo que existen otro tipo de alternativas como derivados de la caña de azúcar fermentada aunque su uso eleve los costos y el tiempo de extracción.