Tal como se especuló desde que se conoció la renuncia del expresidente Álvaro Uribe a su curul en el Senado, finalmente el proceso que era llevado en la Corte Suprema de Justicia en su contra por el caso de manipulación de testigos pasará a la Fiscalía.

Al momento en que la Corte Suprema de Justicia ordenó detención en su domicilio al expresidente Álvaro Uribe Vélez, casi de forma inmediata los simpatizantes del líder del Centro Democrático, figuras políticas cercanas, entre otros, comenzaron a pedir que el alto tribunal no fuera el que continuara el proceso, sino que pasara a manos de la Fiscalía.

El argumento recurrente entre los uribistas para esta petición es que, según ellos, supuestamente la Corte Suprema está politizada y eso afectaría la imparcialidad en el proceso que se adelanta al expresidente. No obstante estas observaciones siempre fueron refutadas por múltiples sectores que aseguran que los señalamientos contra la Corte son una estrategia de desprestigio.

A pesar de las opiniones que existen respecto a la competencia sobre el caso de Uribe, la Corte Suprema de Justicia anunció este lunes que, tal como lo solicitó la defensa del expresidente, su expediente pasará a manos de la Fiscalía. La decisión fue tomada de manera extraordinaria.

Recordemos que los abogados del exsenador del Centro Democrático argumentaron que el Alto tribunal no podía continuar conociendo del proceso, pues perdieron competencia tan pronto fue aceptada en el Congreso la renuncia de Uribe.

Por su parte, el senador Iván Cepeda, quien figura como víctima dentro del caso, anunció en una rueda de prensa que acatará y respetará la decisión de la Corte, pero que acudirá a las acciones legales necesarias para recusar al fiscal general Francisco Barbosa, pues considera que debe declararse impedido para tener control sobre el expediente.

Lea aquí un trino al respecto.