Para muchos es sorprendente que el Gobierno siga en la penosa tarea de negar, que la presente, ha sido una mala administración. Ahora, la Canciller y vicepresidenta Marta Lucía Ramírez se refirió al informe más reciente de la FAO y aseguró que le parecía «curioso» que otros países de la región, con problemas económicos, no estuvieran incluidos en el mismo.
El informe al que se hace referencia es un documento publicado por la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO por sus siglas en inglés); sobre «20 puntos críticos de hambre». El documento señala que hay lugares donde la seguridad alimentaria podría agravarse entre febrero y mayo de este año, Colombia hace parte de esa lista.
Si bien la FAO reconoce que hubo recuperación económica frente al 2020, aclara que precisamente por el aumento de los precios de los alimentos y el deterioro del poder adquisitivo es que estamos en riesgo. Además, es probable que la seguridad alimentaria se deteriore en los próximos meses debido a una combinación de problemas económicos, inestabilidad política, crisis migratoria y un alto número de desplazados internos.
Debido a todo lo que dice el informe, el Gobierno radicó un comunicado rechazando que Colombia fuese mencionada como un país que está en riesgo de padecer hambre aguda. «Debo reconocer que este informe nos tomó por sorpresa. En primer lugar, porque lo que se acostumbra internacionalmente es que estos informes que trabajan las agencias que tienen sede en el país siempre se discuten previamente con el Gobierno”, comentó Martaa Lucía Ramírez.
Los datos que fueron publicados a través de redes sociales, fueron cuestionados por la vicepresidenta, incluso cuestionó la metodología, el soporte fáctico y las fuentes que usó la FAO para emitir las alertas tempranas sobre los focos de inseguridad alimentaria.
La Cancillería señaló que pese a la pandemia, la economía colombiana creció 9.5%. Por otra parte, las cifras de desnutrición de niños y niñas descendieron en un 39,1 % entre 2018 y 2020. Y aclararon que “Colombia tiene una capacidad de autoabastecimiento del 72% de la producción agropecuaria que se demanda para el consumo interno de alimentos”.
