La Defensoría del pueblo no ha parado de repartir la “mermelada” y han nombrado a Rubby Durán Maldonado, como Directora Nacional de Recursos y Acciones Judiciales. Ella es la esposa de Gabriel Jaimes, el fiscal que solicito que se archivara el caso del expresidente de Colombia Álvaro Uribe Vélez.
Cabe recordar, qué el fiscal Jaimes, era el encargado del caso de Uribe, quien estaba siendo investigado por la presunta manipulación de testigos, a pesar de saber los antecedentes y cercanía que tenían el ex presidente, con el ahora embajador de Colombia ante la OEA, Alejandro Ordóñez.
Se ha vuelto una “tradición” en Colombia, pues una manera de devolver favores políticos a los partidos de los que recibieron apoyo, es dar nombramientos en cargos directivos. Ya se han visto varios casos como el de la Defensora Delegada para la Política Criminal y Penitenciaria, Diana Margarita Silva, quien es mano derecha de Rafael Nieto y hace parte del Centro Democrático.
También está el caso del Jefe de la Oficina de Planeación, Alberto José Valcarcel, quien es cuñado del Fiscal General Francisco Barbosa. Definitivamente la Defensoría sabe cómo agradecer a los políticos, pues desde que Carlos Camargo se posesiono como Defensor del Pueblo, se han hecho 38 nombramientos directivos, de los cuales 26 tienen vínculos con alguno de los partidos que apoyaron en su campaña.
Gonzalo Guillén, fue quien se encargó de dar a conocer el nombramiento a través de twitter, “crece la endogámica de la corrupción: Rubby Durán, esposa de facineroso fiscal Gabriel Jaimes, es una de las corbatas más anchas que tiene la Defensoría del Pueblo”, manifestó el periodista.
Los usuarios se pronunciaron ante esto y dijeron, “para ocupar un puesto de estos hay que ser una rata o familiar de una de las ratas que tenemos en Colombia. Me parece inaceptable que reciban postulaciones de parte de la ciudadanía y que se roben los 30 mil pesos que valen los pines de inscripción para estos “concursos” y saber que nunca vamos a ganar, claro que ya nada me sorprende, aquí nos acostumbramos a esperar y recibir lo peor”, manifestó una internauta.
“Definitivamente si uno no hace parte de la “elite” de Colombia, uno no vale nada, me pregunto ¿no hay manera legal de exigir transparencia en estos nombramientos?, esto es inaceptable, tenemos el agua hasta el cuello y estamos llenos de ratas por todo lado, ¿no será posible denunciarlo y que se revise?, fueron algunos de los comentarios.
